Caricatura de un hombre descubriendo un tesoro

¿Cómo encuentro un mosquito (mi consejo)?

El mosquito pasa cerca de tu oído, en modo bombardeo, antes de refugiarse... ¿en algún sitio? ¿Junto al armario? ¿Junto a la cama? ¿En el techo?

No te molestes en buscarlo, deja que venga a ti. Éste es mi consejo para encuentra un mosquito... ¡y destrúyelo!

Respira hondo para que salga de su escondite

El primer paso para encontrar un mosquito en tu dormitorio es hacer que salga de su escondite. El insecto no siempre está al acecho, y puede quedarse levantado mientras te duermes, por ejemplo.

Y por eso tendrás que usar tu respiración.

Sí, has leído bien: tu respiración. Los mosquitos se sienten atraídos por el dióxido de carbono que desprendes al respirar. Por eso les gustan especialmente los humanos.

¿Cómo lo haces? Túmbate boca arriba y respira profundamente. Inspire, expire, répète l’opération plusieurs fois. Petit à petit, tu vas dégager de plus en plus de gaz carbonique dans ta chambre, ce qui va inévitablement appâter le moustique.

Para que sea aún más eficaz, puedes utilizar tu smartphone junto a ella con el brillo al máximo, o incluso la función de linterna. La luz atraerá a los mosquitos, que no tardarán en enjambrar.

¿Qué ocurre a continuación? En unos instantes, el mosquito se mueve hacia ti, atraído por la luz y el dióxido de carbono.

No tengas miedo.

Mantén la calma.

¡Estás a punto de encontrarlo!

Un peu de patience : tu pourras bientôt le dégommer

Ten paciencia y espera a que el mosquito -ese chupasangre insoportable- se pose sobre tu teléfono o sobre ti. Puede que te lleve unos minutos, pero no te rindas El mosquito se agrietará antes que tú. Una vez que has conseguido atraerlo, estás en una posición de fuerza. Pero, ¿cómo lo matas?

Coge un pañuelo, el matamosquitos cerca, o un objeto que puedas simplemente aplastar sobre este invasor, como una zapatilla o una revista. Por supuesto, no rompas tu smartphone en el proceso.

Si el teléfono es insuficiente (o alternativamente), no dudes en utilizar otras fuentes de luz, como una lámpara, la televisión, la pantalla del ordenador, etc.

En resumen, acabas de construir una trampa para mosquitos formidablemente eficaz a partir de tu aliento. Una locura, ¿verdad?

Adiós a las tardes y noches tranquilas: ¡el mosquito no tiene por qué preocuparse de este truco!

Y la próxima vez que oigas un zumbido insoportable cerca de tus oídos, ya sabes lo que tienes que hacer para encontrar a los mosquitos.

No alimentes al mosquito